Tratamientos biológicos

La utilización de las primeras vacunas, el uso de los antibióticos, y el descubrimiento de la estructura del ADN supusieron grandes avances en la medicina enfocados a vencer y superar las enfermedades.

En iQtra llevamos más de diez años involucrados en la medicina regenerativa, no solo con las células madres y los factores de crecimiento, sino con otras técnicas que nos permiten tratar fracturas, lesiones tendinosas, lesiones meniscales, artrosis de cadera o de rodilla, con procesos que son muy poco agresivos cuando los comparamos con los clásicos.

Infiltracion

Infiltraciones de 

Plasma rico en factores de crecimiento

Las infiltraciones de plasma rico en factores de crecimiento (PRFC) para curar lesiones óseas y musculotendinosas se han consolidado como una excelente opción de tratamiento, no solo en la traumatología ortopédica, sino también en otras áreas médicas.

Se trata del primer sistema de plasma autólogo, es decir, que se utiliza sangre del propio paciente. En nuestra sala blanca (propiamente esterilizada y con los controles sanitarios pertinentes), de forma ambulatoria a partir de la centrifugación de una muestra de sangre que se extrae en el momento. Los diferentes compuestos sanguíneos se separan, de manera que se pueden inyectar dos o tres mililitros de plasma que contiene una alta concentración de factores de crecimiento tisular. Estos son los elementos de la sangre encargados de estimular el proceso de curación y regeneración de los tejidos. Inyectado de manera localizada, este compuesto se ha vuelto prácticamente indispensable para prevenir, tratar e incluso utilizar en las cirugías.

Gracias a dispositivos como el fluoroscopio o el ecógrafo, la aplicación de las infiltraciones en consulta es muy precisa, lo que redunda en una mayor eficacia terapéutica. El especialista llega a la zona que debe tratar de manera indolora, sin agresión a los tejidos circundantes; y en muchos casos, la infiltración de plasma rico en factores de crecimiento puede ser una alternativa a la cirugía.

¿Qué beneficios tiene?

  • Reducción de la inflamación local
  • Regeneración tisular más eficiente
  • Disminución significativa del dolor
  • Menos riesgo de infección
  • Tiempo de cicatrización reducido
  • Recuperación más rápida

 ¿A quién va dirigido?

  • Fracturas
  • Roturas de ligamentos
  • Tendinopatías crónicas
  • Roturas musculares
  • Roturas tendinosas
  • Lesiones meniscales
  • Artrosis

¿Es doloroso el tratamiento?

Se puede experimentar ligero dolor e irritación de la zona durante o inmediatamente después. A veces es necesario limitar el movimiento o cargar peso inmediatamente después. De 1 a 3 días después, se puede volver de manera gradual a las actividades físicas normales con la aprobación del especialista.

¿Qué riesgos tiene?

Como el PRFC se obtiene de su propia sangre, el riesgo de complicaciones es bajo. Como cualquier inyección, hay un mínimo riesgo de lesión de estructuras anatómicas próximas a la zona de aplicación. También existe un mínimo riesgo de infección.